Los griegos estaban dentro del caballo. Bien callados y armados completamente, esperando a que llegase la noche y pudieran salir del escondite para invadir Troya. Los demás griegos esperaban en las afueras de Troya a que los que se encontraban en su interior les abrieran las puertas y así poder acceder a ella y comenzar la guerra.
Fuente: apuntes de instituto.
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